El primer mundial de Gaby coincide con una de las participaciones más decepcionantes del hóckey argentino, fue el Mundial de San Juan’89, Argentina acabaría en quinto lugar, eclipsando así una excelente actuación del joven debutante, el cuál consiguió 12 goles, situándose entre los primeros goleadores cuando no llegaba a jugar más de diez minutos por partido, incluso no tuvo ni la oportunidad de jugar contra ningún rival de renombre, ya que al caer eliminados en cuartos de final, se perdió toda opción al título, así y todo cuenta Gaby que fue una de las experiencias más hermosas que ha tenido con la selección, nunca antes había sentido lo que significaba ser un verdadero ídolo, además al finalizar el mundial y coincidiendo que era el último torneo que disputaría el Gordo Agüero con la albiceleste, Gaby le pidió cambiar su primer camiseta argentina por la última del gran Mario, el gordo provocó uno de momentos más emotivos en la carrera de Gaby "me dijo; tomá compañero de pieza, se va un grande y entra otro, el GORDO, un jugador único se retiraba y me dejaba a mí lo más valioso que me podía dar".
